Tomando algo con James

Bajamos de la moto y la aparco tranquilamente. Después entramos al bar. Saludo al camarero y nos sentamos en una mesa.
El bar estaba tranquilo, no había mucha gente que digamos y se oía música de fondo.
¿Te gusta el sitio?

El camarero se acercó con una libretita.
Hola... Saluda. Han llamado aquí y me han dicho que te diga que dónde tenías el móvil. Dice despreocupado mirando a Amanda.
¿Quién era? Le pregunto.
Tu padre, y tenemos cena familiar el miércoles... Se encoje de hombros. Ya sabes, lo de siempre.
Asentí con la cabeza. Yo quiero una coca cola... ¿Tú qué quieres? Miro a James.

Y mañana tienes reunión en el banco. Suelta el camarero antes de irse mientras reía.
¡Mañana es domingo! Suelto para que me oyera. El chico se da la vuelta y se encoje de hombros. Mi padre es tonto... Me quejo. Reunión dice, un domingo... Dios...Me percato de que James me miraba de forma extraña, seguramente no había entendido nada.
Es mi primo. Digo, refiriéndome al camarero.

En nada... Pero soy una futura heredera de un banco... Y bueno, mi padre quiere inculcarme el trabajo desde ya... Me encogí de hombros. Vive para el trabajo, y piensa que los demás también... Lo que tenía que hacer es dejarme dormir y luego hacerme un resumen... Bromeo

Lo sé... ¿Por qué piensas que mientras tanto hago lo que me da la gana? Un gran poder, conlleva una gran responsabilidad... Eso dice mi padre, y el abuelo de Spiderman... Me río. ¿Tú trabajas?

¿Y cuáles son esos objetivos? Pregunto interesada. Yo también estudiaba, pero tenía otro objetivo: Patinar. De momento, lo iba consiguiendo, y eso me enorgullecía bastante. El camarero nos trajo las coca colas y unas patatas para acompañar.

¿Cantas? Pregunto interesada. ¿O tocas, o qué? Recuerdo mis tiempos en los que tocaba la flauta travesera, no lo haciá mal, pero prefería el patinaje, mil veces más.
Era muy difícil hacerse notar en el mundo de la música, habían muchas discográficas y mucha gente con dinero que cantaba mal... Ahora entendía por qué estaba así ese mundillo.

Abrí mucho los ojos.
Y yo que pensaba que tocar la flauta travesera era guay... Tocar todo eso y aún encima cantas... Y has compuesto canciones... Vaya, ya eres más que muchos cantantes que sacan cuatro o cinco discos sólo por su cara bonita...

Siento algo parecido.. Por algo me salto clases en la universidad, sé que el banco lo tendré para cuando quiera, el patinaje no... En cuanto cumpla los 20 y tantos, me tendré que olvidar. Mientras tanto... A tope. Sonrío. Por fin alguien que tenía algo en común conmigo, le interesaba algo y quería conseguirlo, dejando los estudios un poco de lado.

Le sonreí y bebí otro sorbo.
Pierdo algunas clases, que luego toca recuperar, pero merece la pena, por lo menos para mí sí... El chico me caía bien, me entendía... Sí.

Bueno, faltar a clase tampoco es que me... Encante, pero tengo mis princpios y mis prioridades... Me encojo de hombros. ¿Y dónde vivías antes?

Me gusta Miami... Suelto de repente. Tengo una prima allí y siempre me está intentando dar envidia que si el sol, la playa, el clima... Todo. Pero bueno, mi sitio está aquí o en Suiza.. Así que... Le sonrío

Aquí hay fiesta si sabes dónde tienes que meterte y con quién tienes que juntarte... No sé si me entiendes... Sonrío. Y sí, estuve en Miami como cosa de dos veces a lo mejor... Con mi prima... Recuerdo todas las peleas de mis padres y la forma de quitarme de en medio era: vete con tu prima a Miami de vacaciones...

Si hubiera sido de aquí, rápidamente sabría quién era yo, y toda mi vida en verso, tenía suerte de que fuera nuevo, así no sabía nada de mí y podría tener una impresión formada por él mismo.
Bueno, pues no sé... Estuve dos años en Suiza patinando, mientras estaba en un internado especializado en deportes, luego volví aquí hace un año y cursé mi último año en el Constance y ahora estoy en Yale.Resumo.

Sí, hago primero, estudio Económicas y empresariales, para luego llevar el Styffen's Bank El banco d emi padre era conocido en todo el mundo, maldita sea. Ahora ya sabe que soy rica y pensará que soy una niña consentida.

Vi cómo abría los ojos.
Sí, mi apellido es Styffen....Soy Amanda Styffen, la hija de John... Digo de repente, al parecer ya se había dado cuenta, qué más daba, loq ue esperaba es que no me tratara de forma diferente.

Bajé la cabeza.
Pero no quiero que me trates... Diferente, vamos, quiero decir que... No sabía como explicarme. Espero que lo entiendas. Me encojo de hombros.

Le sonreí como muestra de agradecimiento.
Gracias. Suelto, y bebí un sorbo de mi coca cola. ¿Algo más que quieras saber de mí?

Prefiero que poco a poco vayas sabiendo más cosas de mí y formes tus propias conclusiones. Digo de repente. Esto es un poco forzado... Y yo no sé por dónde empezar. Le sonrío.

Le di un último sorbo a la coca cola.
¿Quieres que vayamos a otro sitio o te llevo a tu casa? La verdad es que me gustaría dar una vuelta con él y así conocerlo mejor, pero no lo iba a forzar

Asentí con la cabeza.
Y quédatelo, invito yo... Le pasé el dinero y me levanté. Un placer haberte conocido. Le sonreí.

Me acerqué a mi primo y estuve hablando un rato con él, no me gustaban las reuniones familiares, bueno, me gustaban a medias, veías a la familia, tal... Vale, pero hablabas de cosas sin significado, y para colmo, la mayoría eran negocios o futuras fiestas de sociedad.
Al rato miré la hora, efectivamente, el reloj se me había parado, necesitaba una pila nueva. Me fui corriendo hacia la moto, seguro que llegaba tarde al entrenamiento.